La fiesta religiosa de Todos los Santos, que se celebra en los países católicos, tanto europeos como americanos, tiene un origen antiguo, como muchas otras tradiciones, los inicios pueden remontar a la antigüedad, e incluso a las épocas de las grandes tribus europeas, como los Celtas.
En México, país fuertemente influenciado por Estados Unidos, hablar en spanglish es tan común como confundir Halloween con el Día de Muertos. Pero, las fiestas difieren en gran parte, la mexicana es una celebración cultural que incluso la UNESCO ha incluido en el Patrimonio mundial de la Humanidad.
¿Qué es Halloween?
La fiesta es popular en los países anglosajones, aunque ha ido invadiendo algunos otros lugares gracias a la propaganda estadounidense a través de sus películas. El nombre encuentra su etimología en la contracción de tres palabras inglesas "All Hallow Eve", es decir, la noche antes de Todos los Santos.
La celebración es vieja de por lo menos unos 2.500 años, puesto que los Celtas la celebraban a finales de octubre. Durante la noche, creían que las fronteras entre el mundo de los vivos y de los muertos se abrían, por ello, vestían con disfraces horrorosos que pudiesen ahuyentar a los espíritus.
Los migrantes irlandeses llevaron consigo esas tradiciones hacia Estados Unidos, a mediados del siglo XIX. Una de las costumbres que mejor se conservan, es la de leyenda que da origen a la popular calabaza naranja de Halloween: La historia de Jack-O'-Lantern, un personaje destinado a vagar eternalmente.
Día de Muertos: Patrimonio inmaterial de la UNESCO
El Día de Muertos, a diferencia de Halloween, no tiene que ver con malos espíritus, si no con la visión poética de la vida y de la muerte, y de la no reducción de la existencia a lo material. La vida y la muerte son complementos, y mientras haya vida, hay memoria, y con la memoria se puede honrar y guardar contacto con la familia que ha dejado el mundo corporal.
Los rituales del Día de los Muertos son más ricos en representaciones simbólicas, en cuanto más se entra en los detalles de esta celebración, mejor se le entiende, y no en vano es admirada por todo el globo terráqueo. El Día de los Muertos es una fiesta rica en tradición, aspectos culturales, y es un espejo de los colores, de la comida, de la alegría, de México para el mundo.
Las similitudes entre ambas fiestas
Como lo decíamos al inicio, ambas se celebran durante o alrededor de la fiesta de Todos los Santos, pero tanto Día de Muertos, como Halloween, son costumbres más antiguas. Las dos celebraciones hablan de la apertura de un portal entre los vivos y los muertos, y las dos celebraciones provienen de culturas muy antiguas.
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